Si estás pensando en escaparte a Calpe, en la preciosa Costa Blanca, te adelantamos algo: te vas a enamorar. Este rincón del Mediterráneo lo tiene todo: sol, mar, historia, naturaleza y mucha vida. Pero si no sabes por dónde empezar, te ayudamos con una selección de 5 actividades divertidas que no te puedes perder.
Prepara la crema solar, las ganas de explorar… ¡y vamos allá!
Qué Hacer en Calpe: 5 Planes Divertidos para Disfrutar al Máximo
1 – Deportes acuáticos
¿Te gusta la acción? Entonces la Playa de Levante (o Playa de la Fossa) o el puerto de les Basetes es tu sitio. Aquí puedes alquilar un kayak, una tabla de paddle surf o probar el windsurf. También hay zonas para bucear o practicar esquí acuático si buscas algo más de adrenalina.
Y si lo tuyo es más tumbarte al sol con un buen libro, no te preocupes: también puedes alquilar una hamaca y dejar que el mar haga su magia.
2 – Un paseo por el casco antiguo con sabor a historia
Alejándonos un poco del bullicio de la costa, el casco antiguo de Calpe es como abrir una puerta al pasado. Callejuelas estrechas, casitas blancas decoradas con flores, mosaicos coloridos y rincones con encanto por todas partes.
No dejes de visitar:
- La antigua muralla
- La Iglesia de Nuestra Señora de las Nieves
Es perfecto para una tarde tranquila, con parada obligatoria para tapear o tomar un helado artesanal.
3 – Sábados de mercado: color, sabor y ambiente local
Cada sábado por la mañana, Calpe se llena de vida con sus dos mercados semanales. Uno está en el centro y ofrece frutas, verduras y productos típicos de la zona. El otro, un poco más alejado, está lleno de ropa, accesorios, flores y artículos de artesanía.
Ideal para pasear, hacer compras diferentes o llevarte un recuerdo original de tus vacaciones.
4 – Subir al Peñón de Ifach (sí, ¡hasta arriba!)
El Peñón de Ifach no es solo una postal bonita, es una aventura en sí misma. Esta enorme roca que se alza sobre el mar es uno de los iconos de la Costa Blanca y está dentro de un parque natural.
¿Te animas a subir? La ruta es exigente en algunos tramos, pero las vistas desde la cima son de otro nivel. Eso sí, es importante reservar con antelación, ya que el acceso está controlado para proteger el entorno.

5 – Disfrutar de la gastronomía
Después de tanta actividad, toca premiarse. Y Calpe es también un paraíso para los amantes de la buena comida. En la Marina y el paseo marítimo encontrarás restaurantes donde disfrutar del mejor pescado fresco, mariscos y los arroces típicos de la zona.
¿Un consejo? Pide el arroz del senyoret o una fideuà con vistas al puerto. Y si la noche se alarga, hay bares y locales donde seguir con el plan.
Calpe es uno de esos destinos que ofrece planes para todos los gustos: relax, cultura, deporte, gastronomía y mucha vida. Tanto si viajas en pareja, con amigos o en familia, aquí seguro que encuentras tu rincón favorito.

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